Selección varietal y clonal adaptada al territorio

Las variedades seleccionadas para la elaboración de nuestros vinos correponde a las variedades tradicionales del Priorat: la Granacha y la Cariñena son la base sobre la qual iniciamos nuestras plantaciones. Estas variedades autóctonas aplicadas sobre portainjertos de probada resistencia a la baja pluviometria como el Richter 110 y con una selección clonal de media y baja producción dan unos frutos de muy buena calidad y moderada producción de entre un kilo y kilo y medio de uva por planta. Otras variedades mejorantes como el Cabernet Sauvignón fueron plantados hace veinticinco años y son algunos de los primeros ejemplos experimentales de estas variedades en la comarca. El Syrah fue incorporado hace diez años con el objeto de incrementar gustativamente y el color de nuestros vinos. Finalmente, hace 6 años, hemos incorporado tambien 3000 plantas de Merlot. Hay que decir que en los años de poca pluviometria las plantas más resistentes a la sequia son las variedades autóctonas ya que se adaptan y pueden superar los intensos veranos con temperaturas de más de 50 grados al sol . De ésta manera , con la fusión de éstas variedades conseguimos unos néctares ricos y complejos, muy bien estructurados y con un alto potencial gustativo y aromático.